Factores a revisar si sus vacas no están llegando al pico de producción

 Evalúe el rebaño para detectar una alta incidencia de mastitis clínica o subclínica. Verifique las muestras de leche individuales de todas las vacas en ordeño usando CMT o DHIA-SCC. El recuento medio de células somáticas debe estar por debajo de 300.000.

En todo el hato, el 10% o menos de las vacas  pueden tener un CMT positivo de 2 o más en una combinación de cuatro cuartos o positivo 3 en uno o más cuartos en las muestras de cuartos.

Al menos el 70% de las vacas en un programa de conteo de células somáticas deben mostrar una puntuación lineal de 1 y 2. 

La salud de la punta del pezón puede ser un problema si más del 20% de los pezones muestran evidencia de erosión, eversión, cortes o llagas. 

Compruebe tanto el sistema de ordeño como las prácticas de ordeño. Cultive muestras de leche y realice pruebas de sensibilidad cuando sea necesario. Establezca tratamientos de rutina para vacas secas antes y después del pezón con los productos recomendados.

Los parámetros nutricionales que se deben verificar son los niveles actuales de proteína, zinc, selenio y vitaminas A y E. Examine y analice la ración o los alimentos individuales en busca de mohos y micotoxinas.

La alimentación insuficiente de granos a las vacas frescas puede reducir la producción máxima de leche. Aumente gradualmente la ingesta de cereales desde aproximadamente el 1% del peso corporal hasta aproximadamente el 2% del peso corporal dos semanas después del parto.

Las complicaciones relacionadas con el tiempo de reposición, como mastitis, metritis, cetosis y abomaso desplazado pueden afectar el pico de leche. La nutrición inadecuada de las vacas secas, especialmente durante el período de primer plano, puede tener un efecto. Revise cuidadosamente las dietas de transición y las prácticas de alimentación, así como el período seco temprano

Condiciones debilitantes como problemas de pies y piernas, daño pulmonar por neumonía o gusanos pulmonares y daño intestinal por enteritis severa o parasitismo pueden reducir el pico de leche.

Se necesita una ingesta adecuada de materia seca de forraje y fibra eficaz para mantener la función ruminal y la producción de leche normales. Las vacas deben recibir un mínimo del 1,4% de su peso corporal en materia seca de forraje. El forraje y la ingesta total de fibra de detergente neutro deben mantenerse en niveles mínimos de 0,80% y 1,20% del peso corporal, respectivamente.

Las deficiencias graves en las raciones o los desequilibrios de energía, proteínas, calcio, fósforo, magnesio, azufre y sal pueden contribuir a reducir el pico de leche.

Cuando la anemia es grave o persistente, la producción puede verse afectada negativamente. Las posibles causas incluyen deficiencias de proteínas, hierro, cobre, cobalto o selenio. El parasitismo externo o interno puede causar anemia severa.

El acondicionamiento excesivo grave de las vacas durante el final de la lactancia o el período seco puede reducir la ingesta total de alimento en el próximo recambio. También puede aumentar la incidencia de problemas metabólicos en el parto, especialmente la cetosis.

La falta de ingesta de agua debido a un sistema inadecuado o un problema de calidad del agua puede afectar la producción de leche.

El hacinamiento de animales en un establo libre puede limitar la producción. Si las vacas se paran demasiado, esto puede causar estrés por fatiga y puede afectar la producción de leche.

 

Verifique los registros para ver si las vacas secas han tenido un período seco de siete a ocho semanas.

https://extension.psu.edu/troubleshooting-problems-with-low-milk-production